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Cientos de jóvenes se reunieron en el Santuario del Padre Hurtado para encontrarse con distintas vocaciones. Comenzaron bailando para calentar los motores, mientras los niños del Cottolengo protagonizaban una batucada y en el interior los esperaban una decena de congregaciones para mostrar sus carismas y conversar sobre las inquietudes juveniles.

“Este es el décimo primer encuentro vocacional de la Zona Oeste”, explica el padre Rodrigo Quintanilla, de la Pastoral Vocacional. “A partir de este año quisimos sumarnos a este evento como pastoral arquidiocesana para compartir y alegrarnos con el llamado que el Señor nos ha hecho a cada uno”.

Jesuitas, Columbanos, Carmelitas Descalzos, Adoratrices, Paulinas y el Seminario Pontificio Mayor de Santiago fueron parte de la plaza de la cultura vocacional. También una congregación chilena, las Hijas de san José Protector de la Infancia, estuvieron presente mostrando su trabajo en hogares de niños, colegios y comedores sociales. La Hermana Jimena Sazo cuenta: “Esta es una posibilidad para mostrar la alegría que produce el servicio al Señor y para que muchos jóvenes nos puedan conocer como congregación”. Por su parte, Gonzalo Bórquez, seminarista columbano, se muestra feliz de la cantidad de gente que convocó el evento: “Me encanta esta feria porque se siente la juventud de la Iglesia. Uno se da cuenta que la Iglesia está más viva que nunca y, sobre todo, que el amor de Dios está presente y sigue llamando a gente e inspirando a jóvenes para que hagan prosperar el Reino. La cantidad de jóvenes que hay acá es impresionante. Creo que hay una gran apertura en saber qué es lo que Dios quiere de cada persona”.

Grupos de confirmación, pastorales juveniles y equipos de servicio llegaron para conocer, reflexionar y compartir. Gustavo Jeria, de la Parroquia Inmaculado Corazón de María, opina que ha sido entretenido “conocer a distintas personas y de la manera en que viven”. Aramis Torres, de la Parroquia Jesús de Nazareth de Estación Central cree que “es una oportunidad para acercarse más al Señor y para conocernos más profundamente”. Maite Díaz y Luis García, del grupo de confirmación de la Parroquia Santa María del Sur, dicen: Ha sido bonito, hay hartos stands muy distintos, de personas que trabajan en distintos lugares del mundo, ha sido una experiencia hermosa”.

En el escenario cantó el grupo Efesios antes de que los animadores los invitaran a un momento de reflexión personal iluminado por la parábola de los talentos. Tras reflexionar sobre los carismas que los jóvenes han puesto al servicio de los demás, hubo tiempo para un compartir grupal con religiosas y religiosos. Finalmente el obispo auxiliar de Santiago y Vicario de la Zona Oeste, monseñor Galo Fernández, presidió la misa con la que culminó el encuentro.

Fuente: Comunicaciones Santiago www.iglesiadesantiago.cl

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